La frustración y la ira son emociones fundamentales que todos experimentamos de vez en cuando. Desde una edad muy temprana, las personas aprenden a expresar frustración copiando el comportamiento que ven a su alrededor, como la agresividad, por ejemplo.
Todos sufrimos frustraciones, y ser capaces de lidiar eficazmente con este problema es una capacidad muy interesante de desarrollar. Tienes que aprender a controlar tu frustración para que no tome el control.
Recuerden su significado
La sensación de frustración sirve para comunicar que lo que está haciendo actualmente para satisfacer una necesidad no está funcionando, por lo que debe probar un enfoque diferente.
Identificar la sensación
La frustración te hace sentir como si tuvieras poco o ningún control sobre tu propia situación y entorno. También es común que quieras rendirte, porque nada parece estar funcionando. El miedo y la ira son dos sentimientos comunes que se asocian con la frustración.
Toma una actitud para transformar tus sentimientos
Para eliminar la frustración, necesitas hacer algo que satisfimente una necesidad. Para ello, primero determine qué sentimientos o sentimientos están causando frustración actualmente, luego determine el mensaje que están tratando de comunicarle.
Los sentimientos que pueden conducir a la frustración y el posible mensaje que pueden estar experimentando son:
Aburrimiento (necesidad de estimulación mental)
Ira (sentir que algo es injusto)
Miedo (te sientes amenazado por algo)
Tristeza (no estás contento con cómo están las cosas)
Soledad (la necesidad de estar con los demás)
Estrés (necesitas tiempo libre para relajarte)
Insuficiencia (no te sientes seguro de tus habilidades)
Averigüe la causa
Si te sientes frustrado, pregúntate "¿Qué estoy haciendo que no funciona?".
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